Sanación Reconectiva y A.D.N

 Hace más de una década, el Dr. Vladimir Poponin, un científico ruso (biólogo cuántico), utilizó luz en un experimento con una molécula de ADN. Mediante este experimento, descubrió un campo multidimensional alrededor del ADN. La luz se configuraba en una ecuación matemática [onda sinusoide] cuando el ADN estaba presente. Él descubrió que el ADN tiene un campo cuántico. No sólo eso, era un campo cuántico de algún modo lleno de información.

 

Cuando se transcribió todo el genoma Humano, se pudo ver cada elemento químico dentro de él. Las cifras son impresionantes, porque en una molécula que es tan pequeña que no pueden verla sin un microscopio de electrones, ¡hay más de 3 mil millones de químicos! La doble hélice de ADN es extremadamente compleja. Esta molécula es lo suficientemente pequeña para considerarse que está en un estado cuántico y Vladimir Poponin demostró que incluso una sola molécula de ADN en efecto tenía un campo a su alrededor.

 

“El experimento del Dr. Poponin consistió en investigar la relación entre el ADN humano y los fotones (partícula elemental responsable de las manifestaciones cuánticas del fenómeno electromagnético). Para realizar el experimento vaciaron completamente un tubo de vidrio sacando todo el aire. De esta manera lo que queda dentro del recipiente son solamente pequeñas partículas de luz (fotones). Posteriormente midieron la distribución de los fotones dentro del tubo, no presentaron sorpresa alguna, ya que los fotones dentro del tubo estaban distribuidos aleatoriamente, como se preveía.

 

Luego de la medición, colocaron dentro del tubo ADN humano y volvieron a medir los fotones, y para sorpresa éstos aparecían alineados con la cadena de ADN. Lo que nos está diciendo esta parte del experimento es que ¡el ADN tiene efecto sobre las partículas que componen nuestro mundo! Esto es justamente lo que el espíritu de las tradiciones más antiguas nos dicen, algo dentro de nosotros tiene efecto en el mundo que nos rodea. Poponin por primera vez comprobó esto en un laboratorio.

 

Pero el experimento no concluyo allí, la segunda fase es más sorprendente todavía, porque cuando removieron el ADN del tubo, se esperaba que los fotones volvieran a distribuirse aleatoriamente, pero lo que sucedió es que los fotones continuaron alineados, aún cuando el ADN ya no estaba dentro del tubo. Este experimento fue nombrado “ADN Fantasma” y lo que nos dice es que nuestro ADN se comunica con las partículas que conforman nuestro mundo.” (www.sriadn.com, accedido el 17 de julio de 2011)

 

Quienes hicieron el Proyecto Genoma Humano (proyecto internacional de investigación científica con el objetivo fundamental de determinar la secuencia de pares de bases químicas que componen el ADN e identificar y cartografiar los aproximadamente 26.000 genes del genoma humano desde un punto de vista físico y funcional) descubrieron que de los 3 mil millones de químicos en la doble hélice del ADN, todos los genes eran creados en las partes codificantes del ADN. Tres y medio por ciento del ADN estaba creando todos los genes.

 

Más del 90% de la composición química del ADN parecía ser aleatoria. No hacía absolutamente nada – que ellos pudieran ver ni entender. Aún el día de hoy, la ciencia no ve lo obvio, que el 90% es cuántico y el 3,5% es lineal.

 

“Cuando usamos esta energía de sanación [Sanación Reconectiva®] estamos haciendo más que arreglar un problema especial; estamos literalmente reconectando las hebras, hebras del ácido desoxirribonucleico: ADN. El ADN es una molécula compleja que consta de dos hebras conectadas en una forma de espiral de doble hélice, como una escalera de mano enroscada. La ciencia enseña que cada ser humano tiene estas dos hebras en cada molécula de ADN de su cuerpo, y esta configuración es la base de nuestro código o impronta genética. De tales partes diminutas de materia se forma la estructura de nuestros cuerpos, nuestros cerebros, incluso gran parte de nuestra personalidad.

 

Lo que la ciencia no enseña ‘por lo menos no aún’, es que en cierto momento ¡podríamos haber tenido 12 hebras de ADN codificando tanta información!”

 

‘Reconectar hebras’ implica que más que continuar el desarrollo lineal, la raza humana se beneficiará al rescatar en el tiempo y traer al presente ciertos aspectos de cuando éramos personas más completas.

 

Esto es parte de lo que está sucediendo ahora con la Reconexión: nos estamos reconectando con quienes fuimos.” (La Reconexión. Sana a otros, sánate a ti mismo. Dr. Eric Pearl, pág 118).

 

Te invito a descubrir el potencial del 90% de tu ADN! Las sesiones de sanación reconectiva se realizan con iguales resultados probados en forma presencial y a distancia!

 

Fuente:Sanacion Espiritual